Esa bueno saber..

Me parece muy interesante esta historia, pero todo el contexto histórico que tiene atrás es aun mas interesante por que hay mucha gente la que no sabe que fue lo que paso y cual fue la inspiración de Griselda Gambaro al escribir esta emocionante historia.
 La primera guerra Chechena comenzó cuando fuerzas rusas intentaron recuperar el control de la República de Chechenia entre 1994 y 1996. A pesar de que Rusia tenia una fuerza superior en soldados, armamentos, apoyo aéreo y al haber capturado la capital, las fuerzas fueron incapaces de establecer un control definitivo en esta área de montaña, por diversos ataques de los guerrilleros chehcenos. Esto llevo al presidente de Rusia , Yeltsin a declarar un cese del fuego en 1995 e iniciar la retirada de tropas al año siguiente. No solamente eso sino que también despues en 1996 Yaltsin acepto reunirse con los rebeldes chechenos por primera vez y negociar la paz entre ambos pueblos

A continuación unas impactantes imágenes de esta guerra en donde también la mayor parte de los muerto fueron niños

UNA GRANDE DESDE CHIQUITA

La novelista y dramaturga argentina Griselda Gambaro, autora de una gran cantidad de obras que fueron traducidas a numerosos idiomas, nació en Buenos Aires el 28 de julio de 1928.

Ya adolescente, esta mujer que comenzó desde muy pequeña a interesarse por el mundo de las letras, por ese entonces, solía ir a diversas bibliotecas públicas en busca de materiales interesantes que le permitieran disfrutar del placer de la lectura.

Su actividad literaria comenzó a través de libros como “Madrigal en ciudad” (ganadora de el Premio Fondo Nacional de las Artes) y “El desatino” (ganadora del Premio Emecé)

Así nacieron entre fines de los años “60 y mediados de la década del “70, trabajos como “Los siameses”, “Una felicidad con menos pena”, “La cola mágica” y “Ganarse la muerte”, una novela prohibida por la dictadura militar.

Como consecuencia de esa censura y la dramática realidad que se vivía en Argentina, en 1976 Gambaro decidió abandonar su país natal y se exilió en Barcelona, donde tres años después publicaría “Dios no nos quiere contentos”.

Al volver a la argentina, la autora,  continuo ampliando su producción literaria y generando material teatral y también siguio acumulando prestigiosos premios como el Premio Konex Diploma al Mérito, el Premio Fundación Di Tella, el Premio de Investigadores y Críticos Teatrales de Argentina por “Penas sin importancia”, el Premio Argentores por “La casa sin sosiego” y el Premio de la Academia Argentina de Letras, entre muchos otros.